Saga Mother: una historia de sonrisas y lágrimas (3)

Con Mother 2 / Earthbound, la historia se repetía por segunda vez, aunque esta vez con el añadido de un esperado y, sin embargo, agrio desembarco en tierras americanas. Pero una vez más, Nintendo no se rindió. Al menos, esta vez el nombre de la saga ya sonaba más en ambos extremos del mundo. A base de sudor y lágrimas, se había conseguido dar un poco más de difusión (aunque a un alto precio) a esta incomparable saga creada por Shigesato Itoi.

Y la llegada de nuevas tecnologías volvió a hacer que a la gran N le picarse el gusanillo. Estamos hablando del año 1994, tan punto Mother 2 se estrenaba en Japón, la maquinaria se había puesto en marcha de nuevo para trabajar (a pesar de todo) en una nueva entrega de la saga, información que se filtró ese mismo año a través de varias revistas especializadas. El foco principal estaba puesto de nuevo en Super Famicom, y en concreto en el supuesto sistema CD-ROM que estaba al caer (algo que, como todos sabéis, nunca sucedió). Las noticias iban y venían, rumores, especulaciones que aparecían y se desvanecían sin nada sólido en lo que apoyarse. Pasaron los años y los de Nintendo cambiaron el rumbo, ahora con la Nintendo 64 ya en el mercado y el 64DD a las puertas, este último sería el que iba a albergar la tercera parte bajo el nombre de Mother 3 - Forest of the Chimera, aunque finalmente se fijaría la propia Nintendo 64 como sistema de salida, cambiándose el nombre por Mother 3 – Fall of the King Pig. El primer título de la saga en tres dimensiones, iba a abandonar el escenario de la América rural para crear otro completamente único, más fantástico y con referencias al antiguo oeste. Ya teníamos título, sistema, muchos datos (entorno poligonal, 12 capítulos, compatibilidad con el rumble pack) y hasta una supuesta fecha de salida (Mayo del 2000), y parecía que la cosa iba estabilizándose poco a poco… pero nada más lejos de la realidad. Eso solo era de cara a los ingenuos fans que esperábamos como agua de mayo más noticias y más información sobre el juego con ojos ávidos de una nueva entrega cuyas pantallas en revistas nos hacían soñar despiertos. Incluso fans de todos los rincones enviaban a la compañía diseños artísticos basados en la saga. En verano del 1999, la demo que hizo abrir los ojos como platos a medio mundo se mostraba en el Nintendo Spaceworld, y unos pocos afortunados pudieron contemplarlo en movimiento, luciendo infinidad de virtudes. Pero al mismo tiempo, el mayor batacazo de la saga estaba a tan solo unos meses de distancia. Un año entero de silencio… y el 22 de Agosto, cumpliéndose los peores temores, se anuncia de forma oficial que EarthBound 64 (como supuestamente se habría titulado en EEUU) quedaba definitivamente cancelado, dando al traste con las expectativas de muchos. A pesar de que la mayoría ya nos temíamos que el juego nunca saldría de Japón, guardábamos un pequeño rayo de esperanza que, con esta noticia, se acabo de diluir.

En una entrevista (o más bien una charla que se hizo pública) bastante reveladora entre Iwata, Miyamoto e Itoi se desvelaron bastantes aspectos de lo que podría haber sido y nunca fue. Una charla con un tono dramático en ocasiones y divertido en otras, por lo que parece sacada del juego mismo si a su esencia nos referimos, pero con un claro y triste mensaje: esto se acabó. En ella, se explicaban las razones de la cancelación abiertamente y sin tapujos. La idea inicial de Mother 3 / Earthbound 64 era romper en parte con lo que los jugadores esperaban de él, algo en lo que ya incitaba a pensar la combinación de metal y madera de la que estaba formado el título. No más imitaciones humorísticas de América, pero sin dejar a un lado el sentido del humor y de la tristeza que había inundado los dos juegos anteriores. El juego quedó entre el 30% y el 60% de su desarrollo (según quien opinase), y todavía adolecía de muchas faltas y aspectos por pulir, como redondear la historia, mecanismos de acción y mucho trabajo de dirección. Lamentablemente, la saga Mother siempre ha sido tocada, de un modo u otro, por la tragedia, provocando una interminable cantidad de decepciones a sus acérrimos fans, cuyo amor por ella se podía apreciar en cualquier gesto. Los problemas, una vez más, se amontonaron hasta rebasar la capacidad de programadores, diseñadores e incluso de una máquina casi todopoderosa en aquel entonces como Nintendo 64. El proyecto fue creciendo de forma exponencial y en un determinado punto, el equipo se vio trabajando con unas especificaciones que sobrepasaban con mucho lo que la consola podía ofrecer. Los pequeños detalles se les fueron de las manos, y cuando empezaron a requerir una cantidad de memoria desorbitada, Mother 3 cayó en las garras del inminente fracaso. Las cosas no iban bien, y el trabajo se estaba convirtiendo en un riesgo incluso para la propia Nintendo (ya no solo económico, sino también de prestigio). El concepto de un juego divertido quedaba oscurecido cada vez más por carencias técnicas, por querer abarcar más y más. Y esta vez ni el propio Iwata consiguió enderezar el barco. Además, el mismo, tuvo problemas para poder estar presente durante el desarrollo, algo que influyó muy negativamente en este. Los problemas técnicos podrían haber desaparecido si el juego saliese para la futura Dolphin (AKA GameCube)… pero debido al esfuerzo, tiempo y energía invertidos… ya era tarde. Itoi propuso soluciones para intentar enmendar el entuerto, como reducir el número de capítulos, pero incluso él sufrió los efectos del extremo estrés que se vivía en el entorno, llegando a ser hospitalizado por ello. El coloquio terminaba de forma muy desoladora. El propio Itoi aseguraba, pidiendo perdón a los fans, que podría haber un Mother 3 en un futuro, pero puede que no en forma de videojuego y, desde luego, no sería el Mother 3 que habían estado creando hasta ahora. Por cierto, sé que el nombre de Earthbound 64 nunca fue oficial, pero he querido utilizarlo por los inmensos recuerdos que me trae.

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